LO QUE NUNCA ME ATREVÍ A PREGUNTAR

1Tes 4, 1-8; Sal 96; Mt 25, 1-13 Hmmmmm… Con ésta, ¿cuántas veces llevo leída la parábola de las vírgenes necias? Puede que cientos, quizá más de mil. Y desde la primera vez, han surgido en mi alma ciertas preguntas que nunca me he atrevido a formular; ha sido...