Comentario Pastoral
INVITAR A COMER ES GESTO SIGNIFICATIVO E IMPORTANTE

Todas las culturas religiosas han dado a la comida un sentido comunitario entre los hombres, o de los hombres con la divinidad. En la Biblia el banquete es un gesto de capital importancia. La comida humana significa fiesta, hospitalidad, amistad, paz sagrada. Es signo de reconocimiento, de alegría por el retorno (parábola del hijo pródigo). Los sabios dan reglas de conducta para las comidas. En el banquete cobra especial relieve el rito previo purifícativo, la palabra, la música, la acción de gracias.

El banquete alcanza su mayor expresividad cuando viene Cristo. Se le invita a la mesa de Lázaro, a las bodas de Caná, a casa de Sim6n, come con publicanos, aprueba la hospitalidad, recomienda el último puesto en el banquete y da de comer a la multitud. Al resucitar se hace reconocer con un banquete, la comunidad cristiana revive al resucitado en la fracción del pan, en la alegría y comunión fraterna.

El rechazo de la invitación que Dios hace, bajo la imagen de rey generoso, es muestra de desprecio, de autosuficiencia y de violencia; es uno de los grandes misterios de la libertad humana. Irse a las tierras propias es preferir las posesiones de aquí abajo. Refugiarse en los negocios indica la absorción total por el trabajo como bien absoluto que proporciona comodidad. Los que no agregan un barrunto de excusa y maltratan injustificadamente a los mensajeros, son quienes radicalmente rechazan cualquier oferta de gracia y de salvación.

Los primeros indignos invitados son sustituidos por los comensales encontrados en los cruces de los caminos de la vida. Uno no estaba vestido con el traje de fiesta. (Según una costumbre antigua los criados cubrían al convidado con una túnica blanca). Si el invitado del último minuto ignora quién es el que convida; si no sabe que para sentarse a la mesa del rey ha de lavarse y cubrirse con el vestido limpio de los festines nupciales, que le es ofrecido gratuitamente, entonces es arrojado a las tinieblas, porque está sucio. Las tinieblas exteriores son lo opuesto a la luz interior, que permite ver la salvación, la alegría y la paz.


Andrés Pardo


Para orar con la liturgia
«Espera, espera, que no sabes cuándo vendrá el día ni la hora. Vela con cuidado, que todo se pasa con brevedad, aunque tu deseo hace lo cierto dudoso, y el tiempo breve largo. Mira que cuanto más peleares, más mostrarás el amor que tienes a tu Dios… «.

S. Teresa de Jesús


Palabra de Dios:

Isaías 25, 6-10a

Sal 22, 1-6

san Pablo a los Filipenses 4, 12-14. 19 20

san Mateo 22, 1-14

Comprender la Palabra

Las tres Parábolas, que San Mateo agrupa, pronunciadas por Jesús en Jerusalem, después de su Entrada Triunfal (Domingo de Ramos), no obstante las diferencias entre ellas, contienen el mismo mensaje: el rechazo del Reino-Proyecto de Dios en Cristo de parte principalmente de los dirigentes religiosos del Pueblo de Dios; el rechazo a su vez resultará ocasión propicia, para que e! Reino-Proyecto de Dios sea acogido por los otros pueblos.

Si en la Parábola de los Viñadores Homicidas (Domingo pasado) se denuncia el rechazo del Reino de Dios, cifrado en los sucesivos Profetas y finalmente en Jesucristo, en la Parábola de los Invitados a la Boda del Hijo del Rey, que escuchamos este Domingo, cabe pensar que los Invitados en un primer momento son contemporáneos de Jesús, que le están viendo y oyendo, y que los Invitados en un segundo tiempo son los que rechazan el Mensaje de Cristo, anunciado por los Apóstoles, por la Iglesia Apostólica. Así parece deducirse de la apremiante llamada del Rey: «Volvió a mandar criados, encargándoles que dijeran a los convidados: «Tengo preparado el Banquete… Todo está a punto… venid a la Boda».

«Pero los convidados -prosigue la Parábola- no hicieron caso, echaron mano de los criados y los maltrataron hasta matarlos «. Pensemos en la encarnizada persecución, que tuvo que sufrir la primitiva Iglesia por parte de dirigentes religiosos judíos, como lo atestigua San Lucas en su Libro de los Hechos de los Apóstoles. La persecución cesa con la destrucción de la Ciudad y del Templo de Jerusalén, a la que se alude veladamente en la Parábola: «El Rey envió tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la Ciudad». A partir de aquel momento histórico la Iglesia se expande por los demás pueblos. Así parece deducirse del mandato del Rey: «Id ahora a los cruces de los caminos ya todos los que encontréis convidadlos a la Boda».

«Y la sala del Banquete se llenó de comensales». Como lo había previsto el Profeta (1ª Lectura): «Preparará el Señor un festín para todos los pueblos…» El Banquete, que el Profeta contempla, es el Banquete celestial anticipado en el Banquete Eucarístico. Al Banquete de la Eucaristía parece referirse la breve Parábola, que el Evangelista añade: la del Convidado, que no llevaba traje de fiesta.



Avelino Cayón


sugerencias litúrgicas

Nuestra Señora del Pilar. Miércoles, 12 Octubre


“Tú permaneces como la columna que guiaba y sostenía día y noche al pueblo en el desierto». Una columna de fuego por la noche y de nube durante el día acompafiaba al pueblo de Israel peregrino por el desierto, dirigiendo su camino. Según una tradición la Virgen María se apareció al apóstol Santiago en Zaragoza sobre una columna. Esta columna o pilar se ha convertido en el signo de la presencia de María en medio de su pueblo, guiándolo y protegiéndolo en su peregrinación por este mundo.

La Virgen del Pilar es invocada como refugio de pecadores, consoladora de afligidos, madre de España, patrona de la Hispanidad. Por encima de milagros espectaculares, la santa Capilla es un lugar privilegiado de oración, donde sopla la fuerza del Espíritu. Nunca faltan fieles que vienen a postrarse ante la imagen bendita en busca de reconciliación, paz, gracia y diálogo con Dios.

La devoción al Pilar tiene una gran repercusión en Iberoamérica, cuyas naciones celebran la fiesta del Descubrimiento de su Continente el 12 de Octubre, es decir, el mismo día del Pilar. Como prueba de su devoción a la Virgen, los numerosos mantos que cubren la sagrada imagen y las banderas que hacen guardia de honor a la Señora ante su santa Capilla, testimonian la vinculación fraterna que Iberoamérica, tiene por el Pilar, con la patria española.

«Brilla aquí en la tradición firme y antiquísima del Pilar, la dimensión apostólica de la Iglesia en todo su esplendor … La fe que los misioneros españoles llevaron a Hispanoamérica es una fe apostólica y eclesial, heredada según venerable tradición que aquí junto al Pilar tiene su asiento secular de la fe de los apóstoles … Aquí, en Zaragoza, luce también la dimensión misionera de la Iglesia y bien en concreto de la Iglesia en España». «Virgen del Pilar desde este lugar sagrado alienta a los mensajeros del Evangelio…» (Juan, Pablo 11, Zaragoza, 10 octubre 1984).


J.L.O.

al ritmo de la semana


Santa Teresa de Jesús – 15 de octubre

Teresa de Cepeda y Ahumada nació en Ávila en el año 1515. Soñadora de utopías, ingresa a los 18 años en el Carmelo de su ciudad natal. Después de sufrir diversas enfermedades, se realiza en ella una conversión, se siente profundamente transformada interiormente, intensificando y perfeccionando su vida de oración, llegando hasta las cumbres de la experiencia mística.

A los 45 años se dedica a reformar los Carmelos, recorriendo España sin tregua ni descanso y superando todos los obstáculos que le salen al paso. En 1562 abre el primer Carmelo reformado: San José de Ávila. A pesar de incomprensiones y resistencias influyó decisivamente en la renovación de la Iglesia en España. Supo conciliar el don de gentes con el trato íntimo con el Esposo, Cristo; el espíritu emprendedor con la oración contemplativa; la actividad incesante con la gracia de la unión mística don de Dios.

Los libros de su «Vida», de «El Camino de Perfección», de «Las Moradas del Castillo interior», de «Las Fundaciones», sus cartas, sus Poemas, son joyas de la literatura española y alimento de la fe. La religiosa que relató su muerte cuenta que en el momento de recibir el Viático dijo: «Ha llegado el tiempo de vemos, Amado mío, mi Señor», y añade: «Siempre en oración, llena de alegría y gozo. con el rostro radiante…rindió su espíritu a nuestro Señor». Murió en Alba de Tormes al anochecer del 14 de octubre de 1582. Pablo VI la-declaró doctora de la Iglesia en 1970.


J. L. O.

Para la Semana

Lunes 3:


Gálatas 4,22-24.27.31-5,1. No somos hijos de la esclava, sino de la mujer libre.

Lucas 11,29-32. A esta generación no se le dará más signo que el signo de Jonás.

Martes 3:
San Calixto. papa y mártir (+222), luchó contra los herejes adopcionistas y modalistas.

Gálatas 4,22-24.26-27.31-5,1. No somos hijos de la esclava, sino de la mujer libre.

Lucas 11,29-3.2. A esta generación no se le dará más signo que el signo de Jonás.

Miércoles 3:
Santa Teresa de Jesús (1515-1582), virgen y doctora, reformadora del Carmelo. Su divisa era: sufrir o morir.

Eclesiástico 15,1-6. La llena de espíritu, de sabiduría e inteligencia.

Mateo 11,25-30. Soy manso y humilde de corazón.

Jueves 3:


Efesios 1,1-10. Nos eligió en la persona de Cristo, antes de crear el mundo.

Lucas 11,47-54. Se pedirá cuenta de la sangre de los profetas, desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías.

Viernes 3:
San Ignacio de Antioquía (+107), obispo de Antioquia, condenado a las fieras, mártir. Escribió cartas a diferentes iglesias.

Efesios 1,11-14. Ya esperábamos en Cristo, y también vosotros habéis sido marcado con el Espíritu Santo.

Lucas 12, 1-7. Hasta los pelos de vuestra cabeza están contados.

Sábado 3:
San Lucas. evangelista. Compañero de San Pablo, escribió el tercer evangelio y los Hechos de los Apóstoles.



2 Timoteo 4,9-17a. Sólo Lucas está conmigo.

Lucas 10,1-9. La mies es abundante y los obreros pocos.