Santos: Antonio de Padua, presbítero y doctor de la Iglesia; Ana, Juan Antípatro, Arnobio, Pedro, Asquirón, Argénides, Belfijo, confesores; Felícula, Aquilina, vírgenes; Fandila, Aventino, Primo, Feliciano, Concorde, Fortunato, Luciano, mártires; Trifilio, Prisco, Ceteo, Peregrino, obispos; Jacobo, Gerardo, monjes.

San Fandila fue un sacerdote natural de Guadix y gran catequista en Córdoba.

A este monje cordobés lo decapitaron en la persecución musulmana, imperando el emir Mohamed, por su actividad apostólica entre los cristianos el día13 de junio del año 853. Es uno de los mártires cordobeses martirizados por el Califa en su intento de suprimir a toda persona significativa y cualificada que pudiera mantener en los demás la fe de Cristo.

Fue la manera de «evangelizar» de nuevo el califato, muy propia de los fundamentalismos de todas las épocas y nada respetuosa con la libertad de las conciencias, ni con el respeto a la dignidad de las personas.

Sus cenizas las arrojaron al Guadalquivir; así se eliminaba también la posibilidad de dar culto a sus restos. Lo que no pudo hacerse fue borrar su palpitante testimonio de fe presente en la memoria cristiana.