Santos: Fructuoso de Tarragona, obispo y mártir, y sus diáconos Eulogio y Augurio, mártires; Fabián y Sebastián, Neófito, Eusebio, Eutiquio y Basílides, mártires; Mauro, Desiderio, obispos; Eutimio, Fequino, abades; Eusebio, ermitaño; Pedro el Telonario, confesor.
Fue papa desde el año 236 y recibió la corona del martirio el año 250, al comienzo de la persecución de Decio, según testimonia San Cipriano.
Se distinguió por su celo pastoral y santidad.
Fue sepultado en las catacumbas de Calixto, en Roma.