Hoy celebramos la festividad de Cristo Rey del Universo. Si miramos a nuestro alrededor nos dejar la sensación de que quien reina hoy en el mundo es, entre otros, el poder y la arbitrariedad, la ambición, la riqueza o la violencia. Y si nos fijamos en la situación de pandemia que estamos viviendo con tanto dolor, tanto sufrimiento y soledad, tanta muerte, parece difícil afirma que Cristo, reina, que Aquel que ha venido a sanarnos siga actuando en el mundo y curando todo dolor y sufrimiento. O si, por otra parte, miramos a nuestro interior, a nuestro corazón y a nuestra vida tenemos que reconocer tanto pecado, odio, división, avaricia, falta de caridad y servicio.
Siendo esto así ¿cómo podemos afirmar que Cristo Reina? En las Lecturas de hoy encontramos una primera respuesta. Su Reino ahora está como una promesa: “Yo mismo buscaré mi rebaño y lo cuidaré. Como cuida un pastor de su grey dispersa, así cuidaré yo de mi rebaño y lo libraré, sacándolo de los lugares por donde se había dispersado un día de oscuros nubarrones. Yo mismo apacentaré mis ovejas y las haré reposar – oráculo del Señor Dios -. Buscaré la oveja perdida, recogeré a las descarriada; vendaré a las heridas; fortaleceré a la enferma.
También el Evangelio nos deja esta respuesta respuesta: “Cuando venga en su gloria el Hijo del hombre, y todos los ángeles con él, se sentará en el trono de su gloria, y serán reunidas ante él todas las naciones”. Cristo, centro y Señor de la historia, reinará en su momento. Cuando el Padre lo tiene previsto desde toda la eternidad se manifestará de modo definitivo e irreversible el reinado de su Hijo: “Cuando venga en su gloria el Hijo del hombre”. Este tiempo es el tiempo de la paciencia de Dios para que los corazones de los hombres se conviertan y puedan participar de ese reinado de Cristo. Por eso debemos aprovechar este tiempo para dejar que su reino, como rezamos en el Prefacio de la Misa de hoy, un reino de la verdad y la vida, de la santidad y la gracia, reino de la justicia el amor y la paz, se abra paso en nuestro corazón y nuestra vida.
Podemos estar seguros de que vendrá con toda su majestad y su gloria, con todos los ángeles y restablecerá toda justicia. Pondrá en evidencia las injusticias y de los hombres y también sus obras de amor misericordia. Y hará justicia: porque tuve hambre y no me diste de comer, ni calmasteis mi sed… Y a quienes no dejaron que su reino se formara en su corazón y no se convirtieron, quedarán definitivamente excluidos de su Reino. Mientras que aquellos que se dejaron transformar por el Corazón de ese Rey, y de este modo dieron de comer al hambriento, visitaron al enfermo, hospedaron al forastero… oirán la sentencia definitiva: “Venid vosotros, benditos de mi Padre; heredad el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo”.
Pidamos a María, Madre de Jesús y Madre nuestra que abramos, como ella su corazón a que su Hijo reine encada uno de nosotros.
Asi Sea. Gracias Padre por sus leciones ďe Amor y entrega
Lecciones de Amor
Jesús, Hijo de Dios Vivo, Señor de la Gloria, Rey del universo. Te has desprovisto de cualquier atisbo de derecho y de riqueza material y has aceptado la muerte para salvarnos en tu gloriosa Resurrección. Entrega de Amor total. Rey del Amor. Celebremos a nuestro Rey que nos ama y se entrega por nosotros. Su única ley es el Amor.
“…el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo…”
“…Yo soy Rey. Para esto nací, para esto vine al mundo, para ser testigo de la Verdad…”
“… en la case del Padre hay muchas moradas…”
“…y Yo voy allí a prepararos sitio…”
“…haz que la creación entera, liberada de la esclavitud, sirva a tu majestad y te glorifique sin fin…”
“… venga a nosotros tú reino…”
“ …el reino de los cielos está en vuestro interior…”
“…un reino eterno y universal: el reino de la verdad y de la vida, el reino de la santidad y la gracia, el reino de la justicia, el amor y la paz…”
“.. Dios lo será todo, en todos…”
“… y quienes nos gloriamos de obedecer los mandatos de Cristo, Rey del Universo, podamos vivir eternamente con El , en el reino del cielo…”
Reina universal de todo lo creado, intercede por nosotros
Maria Madre Querida. Arropanos con Tu Manto Protector
En la Misa el momento de La Consagracion en QUE SE CONVIERTF el pan en El CUERPO DE CRISTO pido siempre, Señor, abre bien mi mente que comprenda el Milagro que Tu nos dejaste como Alimento del alme. Que en ese Pan estás TU EN CUERPO Y SANGRE
Conbierte
Grscias Señor por venir a mi en la Eucaristia dos veces tan segúida. . Me lo confirmo un dia , D. JOSÉ . Donde estarà? Era muy ameno los Lunes con la Biblia..
Todos los Domingos voya comer con mi hijo Daniel enGinos, las 2.30. Que mejor quedarme a Misa de 1, el lugar de ir con las viudas a tomar el aperitivo. Claro que con esto,cada vez me quedo sinamigas. Pero Te Tengo a Ti Señor, todo lo demas no tiene importancia.
Que bonita la exclamación de hoy
¡¡¡¡¡ VIVA CRISTO REY!!!!!!
Gracias por comentarios de enseñanza en Jesús Rey dé nuestro corazón
Madrugón para llevar el coche al taller. Se me engancho una aleta en él bordillo de un árbol. Iré a Misa dando un paseo,
Sigo anotando, con el examen a mano, y la ayuda del Espíritu Santo, sepa reconocer, las faltas , si son leves o no tan leves. Mi deseo es recibir la Eucaristía, con el alma lo más limpia posible