PRIMERA LECTURA
Vivo, pero no soy yo el que vive, es Cristo quien vive en mí.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Gálatas
Hermanos:
Yo he muerto a la ley por medio de la ley, con el fin de vivir para Dios.
Estoy crucificado con Cristo; vivo, pero no soy yo el que vive, es Cristo quien vive en mí.
Y mi vida de ahora en la carne, la vivo en la fe del Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí.
Palabra de Dios.
Sal 33, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9. 10-11
R. Bendigo al Señor en todo momento.
Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. R.
Proclamad conmigo la grandeza del Señor,
ensalcemos juntos su nombre.
Yo consulte al Señor, y me respondió,
me libró de todas mis ansias. R.
Contempladlo, y quedaréis radiantes,
vuestro rostro no se avergonzará.
El afligid invocó al Señor,
él lo escuchó y lo salvó de sus angustias. R.
El ángel del Señor acampa en torno quienes lo temen
y los protege.
Gustad y ved qué bueno es el Señor,
dichoso el que se acoge a él. R.
Todos sus santos, temed al Señor,
porque nada les falta a los que lo temen;
los ricos empobrecen y pasan hambre,
los qu buscan al Señor no carecen de nada. R.
Aleluya Jn 15, 9b. 5b
R. Aleluya, aleluya, aleluya.
Permaneced en mi amor – dice el Señor -;
el que permanece en mí y yo en el, ese da fruto abundante. R.
EVANGELIO
El que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante.
Lectura del santo Evangelio según san Juan 15, 1-8
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento que no da fruto en mí lo arranca, y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto.
Vosotros ya estáis limpios por la palabra que os he hablado; permaneced en mí, y yo en vosotros.
Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante; porque sin mí no podéis hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden.
Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que deseáis, y se realizará.
Con esto recibe gloria mi Padre, con que deis fruto abundante; así seréis discípulos míos».
Palabra del Señor.
‘»Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento que no da fruto en mí lo arranca, y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto.
Vosotros ya estáis limpios por la palabra que os he hablado; permaneced en mí, y yo en vosotros.
Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que deseáis, y se realizará.
Con esto recibe gloria mi Padre, con que deis fruto abundante; así seréis discípulos míos».
Yo deseo que la savia del Amor Humilde de Dios se extienda en el corazón de cada persona, haciéndose humilde y amorosa para con su prójimo. Que la Gloria de Dios sea llena de frutos buenos, porque tras estar siempre sirviendo Dios a la humanidad, ya es hora de que la humanidad se deje amar por Dios como campo bendito por el Humus, el Agua y el trabajo del Labrador.
Seamos campo propicio para Gloria de Dios. Entonces sabremos aprovechar el Agua del mar para que, limpia de sal, reguemos en plenitud nuestras tierras cultivables y forestales.
Gloria a Dios en las alturas y en la Tierra Paz a todas las personas a las que ama el Señor y devuelvan, todas, su Amor Humilde a Dios.
Seamos fieles en la barquita de Jesús que es la Iglesia.
Como María y José
«Hay quien oye el mensaje del Reino, pero no lo entiende»
El Evangelio, hoy, nos habla de cómo tenemos que disponer nuestro corazón para acoger la Palabra de Dios. No es cuestión de inteligencia, de capacidades humanas, sino de docilidad, de obediencia, de apertura y sorpresa a la acción de Dios. La Biblia nos enseña que no podemos ser discípulos de Jesús si no nos alimentamos cada día de la Palabra de Dios.
En una ocasión, Jesús les dijo a sus discípulos: «Si os mantenéis fieles a mis palabras, seréis verdaderamente mis discípulos; así conoceréis la verdad y la verdad os hará libres». El Salmo 119, en el versículo 18, nos dice: «Abre mis ojos, para que contemplen las maravillas de tu ley». Hoy es una suerte contar con traducciones maravillosas de la Biblia, con planes de estudio, con herramientas que nos ayudan a penetrar en lo que Dios nos ha comunicado: su misterio de amor.
Rezo cada dia el Santo Rosario dos veces mañana y tarde.
Y siempre pido por la Paz en el Mundo, por los niños que nacen. Por la almas del Pulgatorio.Te invito a que tu también lo reces cada dia al menos una vez.
Tu hermano en la fe: José Manuel.
Querido hermano:
En el Evangelio vemos que, dependiendo de la diferente actitud y la apertura personal, la semilla de la Palabra produce un fruto o otro. Está el que reconoce el amor de Dios, pero no profundiza, no acoge la Palabra de Dios cada día, vive una religiosidad de mandamientos, se limita a cumplir con los mínimos. Sería como mantener una relación de amor con una persona en la que previamente, cada mes, establecieran momentos especiales para estar juntos, para intimar, para hablar, pero todo se redujera a lo previsto, a los gestos estipulados, a lo establecido, y nunca se pudiera ir más lejos de lo tasado con anterioridad.
Rezo cada día el Santo Rosario dos veces mañana y tarde.
Y siempre pido por la Paz en el Mundo, por los niños que nacen, Por las almas del Purgatorio. Te invito a que tú también lo reces cada día al menos una vez.
Tu hermano en la fe: José Manuel.
Vivir en ti contigo, permanecer en Tu amor , tenerte presente en todo y en todos … y saberme cuidada protegida guiada amparada x tu gracia disculpada x tu infinita misericordia ! Q mis sentimientos sean los tuyos y algún día no haya lugar en el corazón o solo muy poco tiempo para la desesperanza ni mal pensamiento al hermano te pido todo eso y te doy gracias x ello mi Señor