PRIMERA LECTURA
No puede pecar, porque ha nacido de Dios.
Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 3, 7-10
Hijos míos, que nadie os engañe. Quien obra la justicia es justo, como él es justo.
Quien comete el pecado es del Diablo, pues el Diablo peca desde el principio. El Hijo de Dios se manifestó para deshacer las obras del Diablo.
Todo el que ha nacido de Dios no comete pecado, porque su germen permanece en él, y no puede pecar, porque ha nacido de Dios.
En esto se reconocen los hijos de Dios y los hijos del Diablo: todo el que no obra la justicia no es de Dios, ni tampoco el que no ama a su hermano.
Palabra de Dios.
Sal 97, 1bcde. 7-8.9
R. Los confines de la tierra han contemplado la salvación de nuestro Dios.
Cantad al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas.
Su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R.
Retumbe el mar y cuanto contiene,
la tierra y cuantos la habitan;
aplaudan los ríos, aclamen los montes. R.
Al Señor, que llega
para regir la tierra.
Regirá el orbe con justicia
y los pueblos con rectitud. R.
Aleluya Heb 1, 1-2
R. Aleluya, aleluya, aleluya.
En muchas ocasiones habló Dios antiguamente
a los padres por los profetas.
En esta etapa final, nos ha hablado por el Hijo. R.
EVANGELIO
Hemos encontrado al Mesías.
Lectura del santo Evangelio según san Juan 1, 35-42
En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba, dice:
«Este es el Cordero de Dios».
Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús.
Jesús se volvió y, al ver que lo seguían, les pregunta:
«¿Qué buscáis?».
Ellos le contestaron:
«Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?».
Él les dijo:
«Venid y veréis».
Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron en él aquel día; era como la hora décima.
Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice:
«Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo)».
Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó mirando y le dijo:
«Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que se traduce: Pedro)».
Palabra del Señor.
Juan Bautista muestra a Jesús a sus discípulos y lo muestra tal cual es: sin rebajas o barnices: «Este es el Cordero de Dios».
Juan lo podía haber presentado más atractivo, más seductor: «Es la estrella de Nazaret», «El carpintero del año», «El maestro emergente de Galilea»; no. Lo presenta como «El Cordero de Dios». Los discípulos de Juan sabían bien que definir a Cristo como Cordero de Dios era como hablar de sacrificio expiatorio.
Los dos discípulos terminan siguiendo a Jesús, pero antes han quedado avisados de las dificultades y conflictos que tendrán que enfrentar al seguir el camino del Cordero de Dios. Ese camino va a transitar la persecución y la muerte martirial.
Más adelante, Jesús se lo recordará: «Si a mí me han perseguido, a vosotros os perseguirán». Cuando los discípulos de Juan se encuentran con Jesús, este les pregunta: «¿Qué buscáis?».
Querido hermano
Y es necesario seguirle en la historia humana, en la familia, en el trabajo, en la diversión. Y, desde allí, dar testimonio del amor del Padre.
En Mateo, un letrado se le ofreció a Jesús para seguirle a donde fuera, a lo que Jesús le contestó: «Las zorras tienen madrigueras y las aves del cielo, nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde reclinar la cabeza». Jesús deja claro que seguirle no nos va a convertir en poderosos, adinerados; más bien lo contrario, que no significa que despreciemos los bienes materiales.
Mientras vivamos en este mundo, los vamos a necesitar. Pero no olvidemos que cuando nos vayamos de este mundo, aquí se van a quedar. Por eso, debemos vivir sin apegos tontos y ridículos, que nos roban la libertad, y el tener que confiar en Dios y en su providencia.
Reza con la Virgen Maria. Cada día Reza el Santo Rosario. Pide por la Paz en el mundo. Tu hermano en la fe: José Manuel.
Quien recibe a Jesús con inocencia, con humildad, nace del Espíritu Santo y del Fuego que da la Luz.
Jesús nació en Belén, en un establo pobre, en la humildad de María y José. Es la Luz.
En la Lectura del Evangelio de la Santa Misa de hoy, leemos como Juan, Andrés y Pedro renacen, porque reconocen, desde la Humildad, a Jesús como Luz y como imán que atrae. Todavía no saben por qué, pero son renacidos, casi como el Ave Fénix, de su humildad, del reconocimiento de su necesidad de encontrarse con quien nos quiere, nos acoge, nos enseña y nos guarda.
Hoy se manifiesta una Epifanía, en el reconocimiento de los pobres, ignorantes y humildes a Jesús.
Pasado mañana, recibiremos la Epifanía de los sabios, los astrónomos científicos que reconocieron en su ciencia la grandeza de Dios y fueron a reconocer y adorar al Niño Dios., llevados por su curiosidad y deseo científico de reconocer en un niño a la Sabiduría y el Poder de Dios, y lo guardaron del maligno.
Sigamos hoy el ejemplo de Juan Bautista el Precursor de la Iglesia, quien proclama: este es el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo. Y seamos como Juan, Andrés y Pedro, quienes renacen y recuerdan la hora de su renacimiento y cómo hasta el nombre cambió uno de éllos.
Busquemos hoy a Jesús, renazcamos de Fuego y del Espíritu Santo de Dios, y reconozcamos, en nuestra particular Epifanía, a Jesús como, Dios y Humanidad integrada, en una persona tan necesitada como cualquiera de la humanidad doliente, y tan pleno de Amor de Dios a la persona humana.
Vivamos con Jesús, María y José, cada instante de nuestra existencia, proclamando el Amor inagotable de Dios Rey Humilde.
Venid y veréis q 2 verbos tan preciosos les dijiste a Andrés y. Juan venid sin gnifica q vaya donde estas ti libremente tras de ti q sea ese mi deseo mi fin en la vida q lo busque yo por deseo del corazón deseo de plenitud deseo de estar contigo de compartir tu camino de ser testigo de tu gloria y veréis se nos abrirán los ojos podremos comprender entender tantas cosas q aún no entiendo tendrá paz el corazón veremos la única verdad y todo lo q se deriva de ella … gracias Señor !!!
No puedo terminar el año 2021 sin agradecer a los comentaristas, Jose Manuel, Manuel, Blanca ,Lola y los demás que os molestáis cada día a escribir algo… Vivo en Navarra pero llevo un año trabajando en Paris y sigo allí de momento. Soy médico. El inicio de cambio de lugar de trabajo puede ser duro o catastrófico, esto fue mi caso pero seguí adelante gracias a la oración diaria apoyada sobre vuestros comentarios , la misa y la confesión. Nos os dais cuenta de las consecuencias de este pequeño gesto diario que hacéis. Gracias y ánimo !
Yo os sigo desde Asturias, y me levanto todos los días para empezar mi oración con vosotros. Gracias a todos los que hacéis tanto bien.
Desde Puerto Rico, isla del Caribe, también les seguimos cada día. Gracias por su dedicación en llevar la Palabra cada día y esos comentarios que ayudan a comprenderla mejor y aplicarla al diario vivir. Gracias y seguimos unidos en este 2022.
Amen
Gracias por las lecturas y los comentarios que dia a dia nos ayudan a crecer y a madurar en la Fe
Feliz Año del Señor 2022, y que sea un año de crecimiento espiritual