En esta fiesta de los arcángeles, es relevante este salmo. Dice la Tradición que los ángeles que se rebelaron, lo hicieron porque vieron que el plan de Dios era humillante para ellos. Que una criatura inferior, como el ser humano, fuera a ser elevado por encima de ellos, era inaceptable.
Y sin embargo, como rezamos hoy en el salmo, la promesa del Señor supera a su fama, es decir, es inconcebible y maravillosa. Hoy damos gracias a Dios por esos ángeles que fueron fieles y que nos ayudan a cumplir esa promesa, que es ni más ni menos que ser semejantes a Dios. Rafael, medicina de Dios. Que seguramente nos ayuda en nuestras heridas. Gabriel, mandado en las ocasiones más solemnes de la historia de la salvación. Miguel, que nos protege en nuestra lucha contra el demonio. Gracias porque ellos eligieron ser fieles al Señor y a su plan. Alabémosle por su eterna misericordia. E invoquemos la ayuda de estos santos ángeles en estos tiempos que nos ha tocado vivir.
“Los ángeles sólo tienen 2 misiones: servir a Dios y ser mensajeros de sus planes”
Jesús se muestra como quien abre el Cielo y lo une a la Tierra. Cuando aparecen los ángeles por medio, no olvides que solo tienen dos misiones: servir a Dios y ser mensajeros de algunos de sus planes. Todo lo demás… ten cuidado.
Pídele al Señor la fe para ver el Cielo abierto sobre este mundo necesitado y que con tu vida, como instrumento de Dios, se pueda unir el Cielo a la Tierra y recibir la bendición de la sanidad y de un Evangelio que sea Buena Noticia.
Dios no se ha ido. Nos lo declaran Miguel, Gabriel y Rafael. Recuerda: ¿Quién como Dios? Fortaleza de Dios y medicina de Dios. ¿No crees que tienen algo que decirnos de parte de Dios?
Dios no se ha ido. ¿Quién como Él? Pues se nos da como fortaleza y medicina.8.
Todos los que rezan mi Rosario tendrán en vida y en muerte la luz y la plenitud de la gracia y serán partícipes de los méritos bienaventurados.