Hoy no voy a poner ejemplos a anécdotas de la parroquia, vamos a dejarle hablar al Espíritu Santo por mano de San Mateo:
Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, proclamando el Evangelio del reino y curando toda enfermedad y toda dolencia.
Al ver a las muchedumbres, se compadecía de ellas, porque estaban extenuadas y abandonadas, «como ovejas que no tienen pastor».
Pastores y ovejas somos todos, es cierto, pero también es cierto que los sacerdotes hemos recibido el sacramento para ser pastores del pueblo de Dios (dejando que nos pastoreen con una buena dirección espiritual, confesión frecuente y unos buenos obispos que nos guíen). Pero lo que digo a los sacerdotes vale para todos por nuestro sacerdocio común que recibimos en el bautismo.
«La mies es abundante, pero los trabajadores son pocos; rogad, pues, al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies». «ld a las ovejas descarriadas de Israel. Id y proclamad que ha llegado el reino de los cielos. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, arrojad demonios. Gratis habéis recibido, dad gratis»
Señores (y señoras en el sacerdocio común), hay mucho que hacer. Mucha gente no se ha enterado que ha llegado el reino de Dios. Seré sincero, me da igual si se han enterado del cambio climático, de la situación de la Amazonia, de la huella de carbono, de la inflación e incluso de la guerra de Ucrania. De eso me entero por muchos medios de comunicación y será mi obligación actuar en consecuencia. Pero cada uno hemos dado nuestra vida para hablar de Jesucristo que trae la Salvación, no para hablar del CO2 ni de la agenda 2030. Por supuesto que como cristiano me preocupa la situación de la creación y de los hombres creados a imagen y semejanza de Él, seguramente más que a los que se dedican a reunirse para ver qué mal está todo. Pero sinceramente, sin Jesucristo y la salvación que espero ¿Qué más me daría?
Hay que trabajar. Basta ya de parroquias cerradas, confesionarios vacíos, horarios de Misas escuálidos, de tantas reuniones inútiles y proclamas de indignación de cómo está el mundo sobre el sillón de mi casa. Matar a los curas, sí, matar a los curas. Que no tengamos tiempo para estar tonteando en internet, para levantarnos a las 10 de la mañana, para abrir la parroquia dos horas al día y quejarnos de lo muy ocupados que estamos. Exigid a vuestros sacerdotes su presencia y su oración. Que lleguemos a la cama agotados y dando gracias a Dios por tanta gente buena y por los pecadores arrepentidos, sin ganas de ver una serie en Neflix. Y si nos matáis así habrá más sacerdotes, más vocaciones y más ovejas que tendrán pastor. La falta de caridad es no hacer que los pastores sean pastores y también Dios os pedirá cuentas de cómo habéis exigido a vuestros pastores que os lleven a buenos pastos. Ojalá cuando nos pregunten a los curas como estamos digamos: “Cansados, gracias a Dios”.
María, madre nuestra, madre de los sacerdotes…, envía operarios a la mies.
Cuanta sabiduría. y qué dicha leerlo.
Que es lo que hizo el santo de hoy, evangelizar hasta la extenuación. Muchas gracias como siempre, por esta feliz semana de comentarios, a la espera del de mañana, y que Dios le siga animando su labor
Buenos días padre! Pero… cómo lo hacemos? Cómo le decimos a nuestro párroco que nuestra parroquia se nos muere, que con las unidades pastorales, nos vemos privados de misas, de confesiones…Le pido a María para que impregne de sabiduría y humildad a obispos y sacerdotes.
Querido padre/sacerdote autor del comentario: pasaba con mi hija delante de una iglesia cerca del parque del Retiro de Madrid y leímos en grandes letras: Aquellos que estéis agobiados, venid a mí. Yo soy asidua de la Eucaristía pero mi hija aún no, y ella fue la que dijo que entráramos a ver a Jesús pues tan bien nos acogía. Eran sobre las tres de la tarde y estaba cerrada tanto esa parroquia como todas las de España (con contadas excepciones). Entre las 14 h y casi las 19 h no es posible ir a un templo del Señor. Tiene razón el comentarista de que así no podemos seguir. También necesitamos una Escuela de pastoral como en México y otros países donde se ilustre y forme a los adultos en nuestra fe. Estoy a disposición para ayudar en todo. Por ahora nadie atendió a mis propuestas. Los caminos de Dios son insondables. Hay esperanza.
XFIN BRAVO!!! IGLESIA A TRABAJAR… 24/7,EN FORMAR Y SALVAR FUERON INSTITUIDAS COMO CABEZAS DE LA «GREY» ++PILAX, JAJA
Gracias estimado comentarista. Tus comentarios son edificantes y agradables por esa pequeña nota de humor que los salpica. Gracias otra vez.
Estoy con Manuela sobre todo en lo que dice de ilustrar a los adultos en las verdades de de nuestra sacrosanta religión.
Dios nos ama.